La historia nos ha marcado que cada deportista, se desempeñe o lo haya hecho, en el amateurismo o el profesionalismo, a lo largo de su carrera deportiva va en búsqueda de nuevos logros y desafíos que le permitan seguir hacia delante con la ilusión de conquistar más anhelos.
Y a la larga, con el correr de los años, más precisamente en el final de su carrera, el deportista decide ponerle un punto a su trayectoria; y deja atrás un gran legado que servirá de ejemplo, motivación o razón para otros deportistas o personas en general.
En esta oportunidad, en CARASUCIAS queremos dedicarle unas líneas a Facundo Hogalde. Ese gran jugador que toda la vida vistió los colores de Hispano Vóley. Y quien en los últimos días decidió finalizar con su periodo como jugador.
Tuvimos la posibilidad de entrevistarlo y amablemente accedió a nuestro reportaje. A continuación, conocé más de él, quien entrenó a pibes sanjuaninos, luego le tocó compartir con ellos el primer equipo y en un torneo nacional se retiró ante ellos.
-Bueno Facu, contános, cómo se dio y cómo manejaste el tema de ponerle un punto final a tu carrera como jugador.
-El motivo de ponerle fin a la carrera es lamentablemente una lesión en la espalda. Hernias de disco específicamente, que afecta mucho al cuerpo para jugar a este deporte que es el vóley. Decidí ponerle fin. Podría haberme operado, pero creo que también llegó el momento en que los más chicos ocupen ese lugar. Estas fueron las razones…
-Tu retiro se da en una Liga Federal, con Hispano, tu equipo de siempre y rodeado de compañeros a quienes has entrenado. Háblanos sobre esto.
-Sobre el retiro en la Liga Federal, la verdad es que siempre pensé en poder retirarme en el club donde jugué toda mi vida. Estuve más de 17 años jugando en Banco Hispano (hoy Hispano Vóley). Y tener el placer de jugar con exalumnos eso no tiene precio. Cada jugador que estuvo en ese plantel fueron exalumnos míos en Inferiores. Eso para mí siempre fue un orgullo.
Esto viene sucediendo desde hace unos años, de compartir equipo con jugadores que fui formando en mi carrera como entrenador. Y la verdad que es muy lindo. Recuerdo anécdotas de ellos en viajes, torneos, demás.
-¿Desde cuándo sos entrenador y por qué elegiste entrenar a juveniles?
-Soy entrenador de vóley desde el año 2011. Eso fue un poco loco, porque yo no tenía pensado en mi vida poder dirigir. Esto es algo que se dio de una manera extraña. Yo estudiaba abogacía y era jugador de vóley. Un día mi entrenador me pidió que pudiera hacer el curso, para acompañarlo porque él lo dictaría. Yo era capitán del club y me pidió que lo acompañe. Hice el curso, pero seguía sin la idea de dirigir. Al año siguiente, mi entrenador me pide que me haga cargo de una categoría. Y eso fue un cambio grande en mi vida. Hasta dejé la carrera que tenía y me dediqué a la docencia. El primer viaje que hice con el club como entrenador me voló la cabeza, me cambió. Dije “esto es lo mío, quiero hacer y enseñar dentro del vóley”. Luego hice más cursos y me metí más de lleno en eso.
-¿Seguirás ligado al vóley de algún modo o es un parate total? ¿O seguirás entrenando a los pibes de Hispano?
-Y… por ahora decidí darle un parate a todo lo que es el vóley. Hoy por hoy es momentáneo, porque tengo otros objetivos en mi vida personal. También en mi carrera profesional con la docencia. A eso quiero dedicarme este año, por eso me alejo porque el club te consume mucho tiempo. Quiero dedicarme a otros proyectos. Seguramente en algún momento volveré, pero no sé cuándo.
-Desde tu óptica, cómo ves el vóley juvenil (damas y varones) de San Juan y el de Argentina. ¿Va en crecimiento? ¿A qué le debería apuntar? Cuál es tu opinión al respecto
-¿Cómo veo al vóley? Y mira… empiezo por Argentina. Ha crecido muchísimo en varones, sobre todo. Durante los últimos años se les ha dado mucha importancia a las selecciones de base. Es decir, la Pre-Menor, Menor y Juvenil, que han crecido mucho. Juegan estos torneos como nosotros y se ve el crecimiento de cada uno de ellos. Recuerdo que tuvimos la posibilidad de jugar un partido con la Pre-Menor, chicos de 15 años, y yo le decía a un amigo que esos pibes en dos o tres años serán grandes y nos ganarán. Son altísimos y crecen en más nivel.
Y en cuanto al vóley sanjuanino, el masculino ha crecido mucho y sigue creciendo. Tuvimos tres equipos que participaron en la Liga Federal y tenemos a tres en la Liga Nacional. Y esta es una oportunidad increíble para los jóvenes. Esto se puede comparar con Buenos Aires, que sí los tienen. Pero que se dé en una ciudad, en una provincia con menos de un millón de habitantes, es increíble.
Y el femenino está un escalón más abajo que otras provincias como Santa Fe, Córdoba o Buenos Aires. No hay equipos de vóley femenino jugando de forma permanente. Y nosotros en Hispano lo venimos intentando, y creo que les puede venir bien a muchas chicas. Es darles continuidad a esos proyectos.
Y en cuanto al nivel femenino en Argentina, el deporte y otros más al ser amateur, como en casi todas, salvo el fútbol, es muy difícil que la deportista se dedique sólo al deporte, de manera profesional, porque no tiene un futuro cercano, salvo que se vaya al exterior, como por ejemplo lo de Candelaria Herrera en Francia. Son pocos los casos.
Si se llegara a profesionalizar la Liga Argentina de vóley femenino, eso dará un salto importante y habrá otra calidad, porque hoy está debajo de otras potencias como Brasil, Estados Unidos, Rusia, China, que son países que tienen años jugando a este deporte y de manera profesional.
Fotografías: gentileza de Facundo Hogalde.
